Múltiples estilos, mucho sabor vigués y simpatía a raudales. Esto es lo que te encontrarás tras cruzar la puerta de El vestidor de Noa. María y Betty, sus dueñas, se lanzaron a montar su tienda de ropa en O Calvario donde las marcas de ropa de Vigo tienen un importante protagonismo.
Esta es la historia de El vestidor de Noa
En abril 2017 el Vestidor de Noa abrió sus puertas. María y Betty se conocieron trabajando juntas y se hicieron amigas compartiendo el gusto por la moda que ambas tenían. Soñaban con montar una tienda donde vender todas esas marcas que a ellas les gustaban, pero que en ocasiones les costaba encontrar en otros comercios. Se dieron cuenta que en la zona de O Calvario no existía una tienda del estilo como la que tenían en mente: urbana, multifacética y desenfadada: “En el Vestidor de Noa queremos vestir a todo tipo de gente, sin prejuicios ni límites. Por eso nos cuesta catalogarnos dentro de un solo estilo. Aquí puedes puedes pasar desde estilos desenfadados, femeninos y muy modernos a looks más clásicos“. Y en Jenaro de la Fuente dieron vida a sus sueño de emprendedoras.
Dentro de toda esa variedad de estilos, lo que marca la identidad de El Vestidor de Noa es su fuerte apuesta por la ropa de marcas viguesas. Y es que el 90% de la ropa que le puedes pedir a Betty y María está diseñada por marcas de la ciudad: Animosa, Be Happiness, Keep and Trendy… Que se complementan con otras marcas como Tiffosi o Compañía Fantástica.
Al preguntarles por su balance tras estos dos años como emprendedoras, ambas lo tienen claro: muy positivo. “Es cierto que cuando arrancas un negocio, que además es pequeño comercio y en un barrio alejado del centro de la ciudad, hay que hacer mucho esfuerzo por sacarlo adelante. Pero hemos tenido mucha suerte con nuestros clientes desde el principio. Su apoyo y el boca a boca han sido de gran ayuda para alcanzar la estabilidad que tenemos ahora“.
¿Quién está detrás de El Vestidor de Noa?
María Macías y Betty Oya son las personas que encontrarás tras el mostrador de El Vestidor de Noa. Dos amigas que llevaban años hablando de un sueño común, abrir una tienda de ropa. Pero a las que los miedos y los posibles fracasos iban frenando año tras año. María hizo un parón en su vida profesional durante más de diez años para cuidar de sus hijos. Las ganas de volver al trabajo cuando éstos se hicieron mayores fueron la clave para finalmente lanzarse con Betty a abrir la tienda.
El nombre de la tienda lo escogieron por la hija de Betty. “Es la única niña dentro de los hijos que tenemos cada una, así que no lo dudamos un segundo“, nos cuenta María.
Un secreto confesable
A pesar de ser todo sonrisas y conversación infinita, dicen que su talón de Aquiles lo tienen con mostrarse en sus redes sociales. Y es que se confiesan tímidas (aunque os digo que no lo parecen en absoluto). “A veces vemos a otras compañeras de otras tiendas que no les cuesta nada soltarse para grabar vídeos y mostrar su ropa, pero cada vez que lo intentamos se queda en nada“.
El deseo Navideño de El vestidor de Noa
“Nuestro deseo de #RiquiñaNavidad es poder volver a reencontrarnos, abrazarnos, quemar las mascarillas y poder volver a hacer la vida que teníamos antes. Ojalá una vuelta de nuestra antigua normalidad dejando atrás esta nueva normalidad, que de normal tiene poco”.
La propuesta de regalo navideño de El vestidor de Noa
La elección de este año de María y Betty lleva mucho significado y una admiración detrás: “Escogimos una camiseta de la marca viguesa Be Happines con Madonna ilustrada porque, además de ser ambas muy fans de la cantante, ella representa fortaleza y superación.”