¿Qué tendrá el Gamboa Vinte para haber triunfado en un local hasta ahora gafe en Vigo Vello? Con una propuesta basada en el producto y la cocina tradicional gallega, este restaurante se ha popularizado entre los vigueses. Y justamente con una propuesta que se sale de las supuestas tendencias del momento. ¿Estarán cambiando los tiempos o son la excepción a la norma?.
Tengo ganas de comer lo de siempre
Comentaba con un amigo hace unos días lo difícil que resulta encontrar lugares donde disfrutar de la comida de siempre. Todo empezó como un juego entre ambos. ¿Cuántos lugares con buenas tortillas en Vigo podías enumerar? ¿Dónde se pueden disfrutar unos buenos calamares a la romana? Las respuestas que se nos venían a la cabeza las podíamos contar con los dedos de una mano. Sin embargo, la situación dio un giro de 180 grados cuando empezamos a pensar en bocadillos con gua bao, tatakis, tempuras o hamburguesas gourmet. Nos los sabíamos todos de corrillo. Y, en este caso, las opciones superaban la decena.
Con esto no quiero decir que los lugares de buena cocina tradicional estén en peligro de extinción. Pero sí que han pasado a un segundo plano en nuestras opciones a la hora de salir. Probablemente, porque en este nuevo mundo quien no haga algo de ruido a nivel digital, pasa más desapercibido. Muchos de estos lugares están gestionados por generaciones totalmente ajenas a las redes sociales. Las de nuestros padres, incluso las de nuestros abuelos. Y al final, o descubres estos tesoros de comida casera por el boca a boca o por los recuerdos que tienes de tu infancia, o te pierdes auténticas joyas.
Este es uno de los propósitos que me he marcado este otoño. Descubrirme y descubriros esos lugares donde disfrutar lo de siempre, pero en condiciones. El sabor de una buena tortilla, unos calamares o un guiso como si fueran los de nuestras madres. Y el Gamboa Vinte tiene el honor de arrancar esta aventura.
Gamboa Vinte: rompiendo tendencias apostando por lo tradicional.
La apertura del Gamboa Vinte suponía una doble apuesta. Por una lado, sus responsables habían elegido un local de los considerados gafes. Ni Belén Bobo con Purita Vida, ni los chicos de Artemar consiguieron arrancar sus propuestas anteriormente. Pero es que además, se decantaron por ofrecer una carta de cocina gallega clásica y priorizar la oferta de restaurante. Y todo ello en la zona de la ruta de tapas y las propuestas frescas por excelencia, como es actualmente Vigo Vello. En definitiva, un caramelito para que esos habituales cenizos que hay por nuestra ciudad pronunciasen su ya famosa frase: “Eso ahí no funciona ni de coña”.
Pues nada más lejos de la realidad. Tras varios meses abiertos, el Gamboa Vinte ha logrado posicionarse como uno de los favoritos en la zona para quien disfruta del buen producto y los sabores de siempre. Tapas clásicas, pescados y mariscos a la manera tradicional y tres opciones de carnes a la brasa componen una carta auténticamente gallega. Todo ello acompañado de una muy buena atención, y sin que el bolsillo duela demasiado al final de la velada (entre 20-25€ por persona).
Nuestro paso por el Gamboa Vinte
Ha sido una de mis bases gastronómicas este verano. El local apenas ha variado con respecto al aspecto que presentaba en la época de Artemar. Sigue siendo igual de luminoso, con dos plantas: una dedicada a tapeo y degustación rápida, y la superior donde disfrutar del formato restaurante.
En las distintas visitas pudimos probar lo más representativo de su carta. Desde los calamares, el pulpo y sus berberechos o almejas en modo tapeo, al arroz de marisco en una cena más convencional. Muy recomendables sus carnes, desde el entrecot, la presa ibérica o la picaña. Servida en plato de barro caliente para que sea el propio comensal el que la remate al punto deseado. Y con pimientos de Padrón como compañeros inseparables. Mimo al producto y sabores caseros. Punto muy positivo para ese servicio tan profesional y atento. Y un remate los postres más clásicos, como no podía ser de otro modo: tarta de la abuela, flanes… La parte dulce es la que menos nos ha convencido.
Para mi próxima visita tengo un plato pendiente: sus chocos con arroz. Llevo persiguiéndolos desde que los conocí, y no hay forma de quitarme ese antojo. Porque desde que Eligio cerró sus puertas todavía no he encontrado sustituto adecuado. Y por lo que me cuentan algunas de mis palomas mensajeras en Facebook, podría estar al nivel de los que allí disfrutaba.
GAMBOA VINTE TABERNA
Rúa Gamboa, 20
36202 VIGO (PONTEVEDRA)
Tfno: 986 166 373
Puedes seguirlos en su Facebook
2 Comentarios